VIERNES, 05 DE AGOSTO DE 2011 01:46
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Mientras en distintos sectores del centro de Santiago la Fuerzas Especiales de Carabineros reprimía cualquier atisbo de manifestación, protesta o, incluso, reunión desde las 18:30 horas, a partir de las 21 horas se comenzaron a oír ruidos de cacerolas y bocinas por todas las comunas de Santiago.
Miles de vecinos salieron a las calles y se congregaron en las esquinas para expresar su apoyo al movimiento estudiantil, su repudio al gobierno y, por extensión, a toda la institucionalidad política. En no pocos lugares corearon “que se vayan todos”.
En el centro dueñas de casa y residentes, incluso de la tercera edad, como en Plaza Italia, tocaron sus cacerolas en apoyo a los jóvenes.
En Carrascal vecinos salieron a las esquinas e interrumpieron el tráfico, lo mismo pasó en varias zonas populares de la Región Metropolitana.
Las cacerolas se oían incluso en barrios acomodados. En Providencia, en la calle Lyon con Providencia las personas salieron a los balcones de los edificios a expresar su apoyo al movimiento y su indignación con el gobierno. Algo similar ocurría en Recoleta, san Joaquín, Ñuñoa y La Reina. Las manifestaciones eran respondidas por bocinazos desde autobuses del Transantiago, taxis hasta caros vehículos 4x4. Un vecino de La Reina aseguró haber escuchado bocinazos de apoyo desde un furgón de carabineros.
Fuente: www.elrodriguista.cl