Ayer martes 27 de mayo, después de una dolorosa enfermedad, falleció nuestra amiga María Sánchez Valdivia, compañera por 46 años de nuestro apreciado conductor y amigo, Nelson Debrott.
Hoy la despedimos con una apoteosis de canto y danza, María parte entre cuecas y tonadas, con las emotivas palabras de Nelson y la voz popular de los instrumentos.
Su partida enluta a la izquierda consecuente, a los y las amantes del folklore, la cueca, la cultura popular, cuyos valores María siempre difundió y defendió.
María no fue de nuestra orgánica, pero siempre nos apoyó en la acción, estuvimos cerrando filas para hacer posible la Unidad Popular, trabajando por el Poder Popular, y después resistiendo a la criminalidad fascista y proimperialista. Desde la gestión cultural, ayudó a l*s populares a reempoderarse, rescatando nuestras raíces. Estuvo con nosotr*s en las buenas y en las malas. Cualquier homenaje que le rindamos hoy, quedará corto frente a sus méritos.
Un afectuoso saludo a tod*s.
Carlos Ruiz
Palabras de Nelson, en el Cementerio General.
Hoy desperté al alba, miré por mi ventana, sobre la punta del San Cristóbal brillaba un astro, una luz, la única en ese cielo diáfano. Sin duda era ella, la Marujita, como le decían en el folclor, la Mena como le decían en la UTE, la Menita como la llamábamos en familia. Ahí estaba, en otro espacio del universo, mi pequeña, la chica, la María Sánchez Valdivia, la gran lidereza del folclor, de la cueca especialmente. Una vez, cuando Marujita era dirigente estudiantil de su querida Universidad Técnica del Estado, un destacado político, vicepresidente de la república, don Bernardo Leighton , la bautizó como "lideresa", una de las veces que fue a la Moneda, cuando participaba activamente en la Reforma Universitaria de esa época. Y eso era mi chica, una auténtica lidereza popular, una luz, un astro, una guía para la acción. Un faro y una maquinita para realizar cosas, para cumplir sueños, para hacer realidad lo que muchos querían hacer y no sabían como hacerlo. En cualquier actividad habría destacado, si hubiera sido periodista, si hubiera estudiado derecho habría sido una brillante abogado, si se hubiese dedicado a la política habría sido diputada o senadora. Pero no, ella amaba otras cosas, ella amaba sus raíces, su cultura popular, su pueblo, su folclor y a eso dedicó gran parte de su vida y se entregó por entero.
Ya cuando estudiaba en su ciudad natal, San Bernardo, lideraba a sus compañeras. como en su querido Liceo Catedral Chileno, del barrio Yungay, frente a la plaza del Roto Chileno donde también estudió y fue una brillante alumna. Cuando entró a la UTE, al pedagógico a estudiar inglés, por cierto que fue presidenta del centro de alumnos y participó activamente del movimiento por la Reforma Universitaria, siendo elegida representante estudiantil en el Consejo Universitario. También participó en la UFUCH, organismo que unificaba a las federaciones universitarias de Chile.
Cuando la conocí, ella estaba en esas tareas, estudiando y luchando. Y siempre encabezando actividades. Eramos jóvenes soñadores, pero ella no se quedaba en los sueños, ella trabajaba para hacerlos realidad.
También soñó con tener una familia , pequeñita como era ella, pero una pequeña familia que formó conmigo, con su madre, doña María Valdivia, con mi madre, Hildegard Puls , con mi hermana Erica y por cierto con David, nuestro hijo. Sus nietos, Luciano y Vicente, le dieron nuevamente una gran alegría y hace pocos años la más pequeña, Clarita, le robó el corazón.
Su verdadera vocación, no la única seguramente, era organizar actividades y llevarlas a cabo. Colaboró durante años como secretaria en la Asociación Chilena de Voluntarios, ad-honorem por cierto. Pero fue en el folclor donde entregó sus mayores y mejores afanes, primero participó como integrante de grupos que ella misma formó. Cuando trabajaba en la Dirección General de Aeronáutica Civil, en su breve paso, ya que fue exonerada por su pasada militancia política, fue fundadora del conjunto folclórico Copihual, que actualmente es el grupo oficial de la Fuerza Aérea de Chile. Luego, cuando nuestro hijo estaba en el colegio Claretiano de San Miguel, participó en el centro de padres y apoderados y organizó muchas actividades desde el departamento de cultura al que le dio vida y luz. El Festival de la Voz, el grupo Verde Aromo, el Club de Cueca Claretiano, el grupo folclórico Claretiano, los talleres de teatro, de cueca, las peñas para juntar fondos para las giras de estudio, y tantas otras, fueron algunos legados que dejó a su paso por ese recordado colegio.
Sus dotes de organizadora y productora las demostró nuevamente cuando en 1994 creamos el Cuecázo, evento alternativo a los campeonatos de cueca. .Varios maestros del folclor criticaban estas competencias pero faltaba alguien que hiciera algo distinto, que fueran muestras de los distintos estilos o modos de bailar la cueca. Y ese alguien fue la Marujita Sánchez. El Cuecazo Metropolitano primero y luego el Cuecazo del Roto Chileno desde el año 2000 fueron logros importantes y marcaron un antes y un después en nuestro llamado baile nacional. Por medio de esos eventos se demostró que para bailar la cueca no era necesario vestirse de huaso ni ser atleta sino que habían muchas maneras, que habiendo una estructura básica, lo demás lo ponía cada cual, con su picardía, con su gracia, con su sabor.
En esas labores de difundir este evento llegó hasta el programa Sabia y Raíz del Folclor Chileno que conduce don Juancho y este querido comunicador estimó que ella debía colaborar más seguido y la invitó a compartir la locución en Radio Universidad de Chile. Por unos 2 años estuvo en ese programa y luego se retiró para hacer un diplomado en Gestión y Producción Cultural en la Universidad Arcis. Luego, en 1997 nos llamaron de esa emisora para realizar una franja de lunes a viernes, la cual organizó junto a Jorge Yáñez, Sara Matamoros y yo. Así dio nacimiento al programa Senderos de Identidad, y el Canto y sus razones que ella misma condujo. A radio Usach llegó en 1998 cuando creó el programa Folclor Sin Fronteras, que se transmite hasta ahora. Colaboró además en la desaparecida radio de la universidad de la República con otro programa dedicado al folclor. Todo ello sólo por amor a su querido folclor.
Cuando se organizó la Semana de la Chilenidad nos llamaron para hacer unas clases de cueca rápidas para el público y se dieron cuenta que ella tenía un gran conocimiento de los artistas y mucho carácter para manejar eventos y le ofrecieron la producción artística por muchos años. Lo mismo sucedió en Providencia, donde fue productora hasta el año pasado Una satisfacción muy grande le dio ese evento ya que es reconocido tanto por el público como por los artistas como el mejor en todo nuestro país. Trabajó también para la fiesta dieciochera de Colina por 4 años, en los inicios de ese evento y colaboró como productora artística en la Fiesta Criolla de Lo Prado, desde sus inicios hasta el año antepasado.
Su relación con Daniel Muñoz se inicia en el Cuecazo del Roto Chileno, el año 2001. Realiza varios de estos encuentros .. Colaboró en la realización del primer disco del grupo Los Tricolores y participó en varios otros proyectos similares. En 2005 produjo el primer disco de Daniel Muñoz y 3x 7 = 21 y las demás grabaciones hasta que Daniel y ella se separaron de esa agrupación.
Cuando se llamó a Daniel para el Festival de Viña del Mar del año 2013, formó un conjunto de músicos y bailarines que fue la base de Los Marujos, grupo que nació para la grabación del disco Cueca, del año 2013, producido también por ella. Otra actividad destacada con esta agrupación fue en Enero de este año para el Festival de Olmué donde se presentaron Los Marujos con gran éxito. Ya estaba enferma en esa época, sin embargo se las arreglaba para continuar trabajando.
María Sánchez , Menita, Mena, Marujita, como queramos llamarla, madre, esposa, productora, comunicadora, seguirás dando tu luz sobre nosotros porque en torno a ti se ha producido una energía muy positiva que nos fortalecerá de aquí en adelante. Has emprendido un viaje a otros espacios, a otra dimensión. Desde allá nos estarás estimulando y alumbrando, para que sigamos en tu senda, la de la cultura popular, la de nuestro pueblo, de la que fuiste una muy digna representante.
Buen viaje chica, querida Menita, hasta que nos juntemos.
Nelson
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