El MPT debe luchar por el socialismo.

A fines de los años noventas, algunos años después de la caída del muro de Berlín, vimos surgir varios movimientos a nivel planetario que se planteaban la lucha contra el capitalismo, movimientos contra la Globalización o simplemente anti-capitalistas, los foros sociales mundiales parecían tener una fuerza imparable, pero en poco más de una década esos movimientos prácticamente han desaparecido y es inevitable que nos preguntemos ¿Por qué ocurrió esto? No basta ser anti-algo, también tienes que explicar cuál es tu alternativa. El capitalismo es un sistema que tiene una forma de producir y distribuir la riqueza y una forma de organización política; si tú terminas con ese sistema, ¿Por qué los vas a reemplazar? ¿Cuál es tu propuesta de sociedad? Esta ambigüedad o falta de propuesta alternativa, finalmente terminó pasándole la cuenta a estos “poderosos” movimientos anti-capitalistas. En los noventas, después de la caída del muro de Berlín, de los “socialismos reales” y el desprestigio que trajo esto para las ideas socialistas, era extremadamente difícil plantearse como objetivo de sociedad, el socialismo. A lo anterior debemos sumarle que los capitalistas a nivel mundial lanzaron una ofensiva planteando que el socialismo había sido derrotado y que esto marcaba el “fin de la historia”, sólo existía una posibilidad, el capitalismo, el neoliberalismo era grito y plata, muchos “socialistas” terminaron siendo más neoliberales que la propia derecha, el caso del Partido Socialista de Chile, es uno de los casos mas emblemáticos a nivel mundial. Hoy la situación es totalmente distinta, las acciones neoliberales hace rato que vienen a la baja y han entrado en una total bancarrota. Pero como en Chile siempre llegamos tarde a las “modas” mundiales, todavía tenemos una derecha y una Concertación defendiendo políticas neoliberales y una izquierda que no quiere pasar del movimiento anti-capitalismo, pero sin una alternativa concreta. El MPT y la necesaria lucha por el socialismo. El Movimiento de los Pueblos y los Trabajadores en su asamblea del 4 y 5 de abril de este año, definió claramente que era necesario terminar con la hegemonía del capitalismo en Chile y a nivel mundial, las diferentes organizaciones políticas y sociales, en un voto de mayoría definió que este debía ser reemplazado por una sociedad socialista, para dejar de seguir marchando hacia ninguna parte. Lamentablemente en los seis meses de vida que lleva el MPT no hemos sido capaces de visualizar suficiente nuestra alternativa de sociedad, esto, hasta cierto punto es casi inevitable dado que esta no es una organización uniforme, sino federada y no existen las “ordenes” de partido, tan típicas de la época estalinista, aunque hoy estos métodos ni siquiera le funcionan al Partido Comunista. Los objetivos estratégicos del MPT deben estar asociados a la construcción de una sociedad nueva, sin clases, solidaria, igualitaria y liberadora, o sea, una sociedad socialista democrática, pero esto debemos decirlo claramente y no dejarlo escrito en una resolución y muy bien guardada en el cajón de un escritorio. Si no somos capaces de definir con claridad nuestro objetivo estratégico de sociedad, necesariamente esto tendera a diluir nuestra alternativa, dada la alienación reinante en nuestra sociedad (control total de los medios de comunicación, a través de los cuales ellos venden su sociedad), también debemos tomar en cuenta que al no hacerlo, fortalecemos todavía más a las elites dominantes, por que no existen contrapesos. El discurso de fondo del MPT debe diferenciarse claramente de ellos, no podemos ni remotamente dejar que se nos confunda con el ala “progresista” de la Concertación, por ejemplo, que en teoría es menos mala que la derecha y que muchas veces hace declaraciones “anti-capitalistas”, contra los malos empresarios, el egoísmo y la codicia, etcétera. La construcción de fuerzas sociales anticapitalistas a escala local y nacional, la necesaria “basificación” del MPT, no se puede lograr en base a conceptos ideológicos confusos o ambiguos. Cualquier trabajador, joven, poblador, no sólo necesita una organización para luchar contra el empresario capitalista explotador o contra un gobierno burgués que destina más recursos a los milicos, que a educación, lo necesita además para entender como terminar con toda esa basura. Si el MPT quiere colaborar concientemente en la reconstrucción del movimiento popular, desde sus bases, hasta su coronación como fuerza hegemónica, debe hacerlo en bases ideológicas inconfundibles y claramente identificables y para eso el ancho paraguas del anti-capitalismo es insuficiente. Por supuesto lo anterior no significa caer en arcaicos dogmas inmovilizadores, fundamentalistas e incomprensibles para el trabajador común y corriente. Y para terminar si la alternativa de sociedad del movimiento anti-capitalista, no es el socialismo, entonces sería bueno que nos explicaran ¿Cuál es ese nuevo sistema? ¿Cuál es esa tercera vía? Celso Calfullan Socialismo Revolucionario Comentario: Publicamos este artículo del compañero peñi Calfullán, compartiendo su análisis y admirando su palabra clara al exponer en pensamiento-acción socialista y revolucionario. Sólo decir que, viendo y viviendo la experiencia de las últimas décadas, cuando se habla de hegemonizar como MPT la movilización de los pueblos, se quiere decir que debemos ser vistos como los mejores, los más serios, comprometidos y efectivos, junto a otras fuerzas que demuestren tener los mismos propósitos y la misma ética y mística revolucionaria.